Dejé pasar el tiempo entre tu y yo
vistiendo de amarillo los papeles,
dejando al desamparo a mi cibeles,
sin anillo en su blanco corte ingles.
Desarmé mis maletas de una vez
y decidí recuperar el equipaje
que he sabido dejar en cada viaje
pretendiendo dejar de ser quien soy.
Comprendí que no se puede luchar,
que en la cumbre o en el fondo del abismo,
el que fui y el que seré son solo el mismo
reflejo en el espejo del que hoy
regresa. En mis manos de escritor,
tras esta larga ausencia programada,
junté a todos los duendes y las hadas
para embellecer al mundo con amor.!
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por dejar tu comentario!